Dos artistas que sin duda surgen como refresco, no solo a este duro verano, sino también a una música chilena sin rimbombantes lanzamientos, en un escenario pequeño pero idóneo para albergar una cincuentena de personas en un formato íntimo entre mesas y tragos.

Estalló la noche y con ello la aparición de Color Music; Efeseis y el productor Mario Bravo ultimaban detalles mientras Restless ajustaba la siempre compleja tarea de chafar los controles y lograr el óptimo sonido.

Nueve en punto y George Solo hizo su entrada. Sentado en un taburete abrió una presentación que combinó sonidos dance electrónicos, new wave y reggetón, con melodías complejas, acabadas letras y mensajes para el nuevo mundo; ese mundo no binario, abierto, denso y experimental del que descuelga su recientemente lanzada «Pastilla Rosa».

Cerca de las veintidós horas subió Juanjo Chilean Project a escena. El ex artista televisivo nos conquistó con un show plagado de luces y ritmos, una aguzada y excepcional voz que transitó por éxitos del pop de ayer y hoy, además de su último hit «One More Night».

Lo ocurrido tras bambalinas me lo reservo. Mención al patio trasero y a todos esos artistas maravillosos que le dieron vida a una jornada de puntapié inigualable para la naciente crew nacional… Una noche para el recuerdo.