4. TOOL. En 1996 recién me enteré de la existencia de una de las bandas más enigmáticas del rock pesado, a esas alturas ellos ya llevaban un EP y un LP bajo su brazo, pero fue Ænima la credencial que los hizo omnipresentes en Mtv, canal de TV que en esa época todavía tenía relevancia en el mundo de la música. La propuesta de Tool, sacando de escena las caras de los músicos, dando prioridad al sonido y a la identidad musical, incorpora intrincados juegos con las métricas, viajes sonoros, crítica social, una base rítmica excelsa, un guitarrista extra meticuloso y a Maynard James Keenan, una de las mejores voces del rock y metal contemporáneo.

Este combo nos voló la cabeza y el CD físico, con su cuidada propuesta artística, se apoderó del Discman que usaba en esos años, rotando incesantemente hasta llegar a rayarse. Cuando comenzamos como banda interpretamos un cover de Stinkfist, aún recuerdo al baterista de esa época odiándonos por hacer que sacara ese track, al cual llamó “un eterno solo de batería”. La construcción de paisajes sonoros y el desafío lírico constante son el legado de esta banda que incluso hoy nos sigue acompañando, empujando los límites de lo que podemos crear.